La frustración es una emoción común que surge cuando uno no puede alcanzar un objetivo deseado o enfrenta un obstáculo en su camino. Puede manifestarse como enojo, tristeza o desesperanza, y puede ser causada por una variedad de razones, como las fallas en el trabajo o en las relaciones personales, la falta de recursos o de habilidades. En nuestras comunidades existen muchas personas frustradas porque sus deseos no han sido alcanzados, ya que están invirtiendo sus recursos en tareas que no producen los resultados deseados. No es más feliz el que más tiene, sino el que sabe qué necesita para tener una vida balanceada. La pregunta que te hago es: ¿Dónde estás invirtiendo tu tiempo, tus pensamientos, tu energía y tus recursos?
Aunque la frustración puede ser desagradable, es importante recordar que es una emoción normal y temporal. Es útil tomar un descanso y reflexionar sobre lo que se puede hacer para superar los obstáculos.
Identifica y vigoriza tus deseos sanos, esos que fortalecen tu salud mental. Elimina los pensamientos tóxicos, la envidia, los celos, los miedos paralizan tu creatividad.
Hoy se vive una crisis mental, emocional, física y espiritual. El materialismo explosivo lleva a las personas a entrar en una carrera por comprar, tener y demostrar lo que vales por lo que tienes. Esto destruye el ser, porque piensas que para poder ser debes tener. La lucha por conseguir el poder, el prestigio, la fama y el dinero está llevando a las personas al dolor, al sufrimiento y a la angustia, viviendo una vida sin bienestar interior.
Conocemos personas que han ganado la lotería y hoy dicen que eran más felices cuando tenían exactamente lo que necesitaban para vivir. También podemos ver a personas que han sido muy exitosas, pero que terminan en la cárcel por dar una comisión a alguien, para conseguir un contrato en el gobierno y a esto se le conoce como corrupción. Otros, a pesar de las fortunas que han logrado ganar, han perdido a su familia, la paz y en muchas ocasiones veces la salud.
La verdad es que la vida es un reto continuo, debemos alinearnos y balancearnos porque todo pasará. Todo lo que comienza termina, vamos a desaparecer físicamente y quedarán los recuerdos en las personas que ayudaste y apoyaste a crecer y hacer felices.
Si te encuentras lidiando con la frustración, aquí te dejo algunas recomendaciones que puedes seguir para enfrentarla de manera efectiva:
Reconoce tus sentimientos: Aceptar que estás frustrado y permitirte sentirlo puede ser el primer paso para superarlo.
Toma un descanso: A veces, tomar un descanso para relajarte y distraerte de la fuente de frustración puede ayudar a aliviar la tensión.
Cambia tu enfoque: Trata de encontrar una manera de enfocarte en lo que puedes controlar en lugar de centrarte en lo que no puedes.
Busca apoyo: Habla con un amigo o un coach sobre lo que te está frustrando para obtener una perspectiva diferente y posibles soluciones.
Establece objetivos realistas: Asegúrate de establecer objetivos que sean realistas y alcanzables, y de reconocer el progreso que haces hacia ellos.
Practica la autocompasión: No te culpes a ti mismo por sentirte frustrado. Trata de ser amable contigo mismo y recuerda que todos enfrentan obstáculos en su camino.
Aprende de tus errores: En lugar de ver los errores como fracasos, trata de aprender de ellos y utilizarlos como oportunidades para crecer y mejorar.
En última instancia, la superación de la frustración es un proceso personal y único para cada persona. Encuentra lo que funciona para ti y recuerda que la perseverancia y la paciencia son clave para superarla.
Te invito a que sientes cómodamente, cierres los ojos, tomes la respiración y te veas y te sientas que estas vivo. Tómate unos minutos en silencio y da gracias por la vida, por tus victorias y tus derrotas, por tu familia, por tu salud, por el amor.
Puede ser que hayas ganado algunas luchas, pero la lucha contra la muerte siempre la perderás, es ley de vida. Así es que no te frustres, esto también pasará.
Por J.R. Román /Master Coach
